Yazemeenah Rossi, la abuela sexy de Instagram
- Por: María Giacoman
Tiene 60 años, el cuerpo perfecto y es 100% natural.
A los 60 años la mayoría de las modelos ha pasado varias veces por el quirófano, pero Yazemeenah Rossi es la excepción a esa regla, y sigue luciendo bella y radiante. Y aunque no descarta hacerse algo en el futuro, dice que prefiere gastarse su dinero en otras cosas.
“No me he hecho nada, pero eso no quiere decir que nunca me lo vaya a hacer. Tal vez un lifting de cuello que mejorase la línea del mentón, no estaría mal. La cuestión es que nunca me ha sobrado el dinero y he preferido gastármelo en mis exposiciones de arte, que yo misma me financio”, explicó al Sunday Times.
La modelo se ha convertido en una verdadera celebridad en redes sociales, donde miles de personas alaban sus fotos sensuales, en las que muestra su cuerpo perfecto, su rostro natural y su eterno pelo blanco, que se ha convertido en un sello para ella, que se niega a teñirlo.
“Me gusta más el aspecto que tengo ahora que el que tenía hace 20 años” dice Yazemeenah, que aunque comenzó en las pasarelas a los 20 años, alcanzó la fama después de los 45, trabajando para grandes marcas como Macy´s, Mastercard o Barneys.
Además de posar para las cámaras, Rossi, que actualmente vive en California, es fotógrafa, hace cerámicas, y se mantiene siempre en contacto con la naturaleza, lo que asegura es su mayor secreto de belleza.
Comenzó a consumir comida orgánica mucho antes de que se pusiera de moda, ya que para ella somos lo que comemos, y la intuición siempre lahizo evitar envases plásticos, preferir lo natural y evitar el azúcar. “Casi nunca tomo pan, lácteos ni comida procesada y cocino cada día, aunque no uso microondas porque no me gusta. Nunca bebo refrescos. Algo de vino, de vez en cuando”, explicó sobre su dieta.
Además reveló que lleva 35 años sin tomar ningún medicamento, que hace deporte todos los días, que se da dos duchas y siempre las termina con agua fría, y una serie de datos de belleza que ella resume en una sola frase: “ser un espíritu feliz en un cuerpo con curiosidad, capacidad de asombro y gratitud”.