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“Se nos va”: La pena de Ivette Vergara y Fernando Solabarrieta

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Los conductores enfrentan el síndrome del nido vacío por partida de sus hijos.

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Era el que faltaba que se fuera. Ivette Vergara y Fernando Solabarrieta sufren por la partida de su hijo menor del hogar familiar. Así lo contó el periodista en conversación con el diario “Las últimas noticias”, donde se refirió a la decisión de Iñaki Solabarrieta Vergara, quien se fue a estudiar a Texas, Estados Unidos.

El joven de 19 años partió a Norteamérica tras ganarse una beca para jugar fútbol y estudiar business en TAMIU, también conocida como la Universidad Internacional de Texas. “La beca fue conseguida por Prime Sports, una compañía que trabaja en Estados Unidos y está dirigida por Felipe Muñoz, hijo de Pindinga Muñoz. A Iñaki lo fueron a ver a sus partidos, mandó videos y gracias a Felipe y a la gestión de Wendy Montgomery se concretó”, relató el comentarista deportivo.

 

Iñaki se suma así a Nicolás y Maite, los otros hijos de Ivette Vergara y Fernando Solabarrieta, en abandonar la casa de la familia: el primero vivió la experiencia de estudiar y jugar en Estados Unidos, y ahora está en Lautaro de Buin; y la segunda está instalada en New Orleans, donde estudia medicina y juega vóleibol.

Solabarrieta indicó que su hijo menor había tenido posibilidades de dedicarse al fútbol, pero ha preferido sus estudios. “Es el más regalón de los tres hijos, pero acá llegó el momento de crecer más. De eso se trata la vida. Se crece a golpes, con dificultades. Pero no me preocupa, está capacitado porque es un chico educado, respetuoso y responsable”, indicó.

La tristeza de Ivette Vergara

El comunicador reconoció que ha sido difícil este proceso. “Es el último polluelo que se nos va. La casa va a quedar vacía. Es difícil, imagínate cómo está la Ivette. Para mí es natural porque es la vida que viví: a los 13 me fui de la casa y a los 16 estaba solo en Santiago. Para mí es el camino natural, pero a la Ivette le cuesta más", comentó la figura televisiva, quien acompañó a su hijo para que se instalara en Texas.

Solabarrieta reconoció que ha conversado con Ivette Vergara sobre qué se viene ahora en su vida tras este cambio. “Es bien duro en términos físicos. Vivimos en una casa grande y ahora nos quedará grandes por todos lados. Es bastante triste y desolador. Pero por otro lado, estoy viviendo un buen momento matrimonial. Espero que sea un augurio de lo que se viene”, afirmó.

Dicen que en esta etapa uno se reencanta, vuelve a pololear y es lo que espero que suceda, después de 21 años casados y 26 de relación. O nos volvemos a enamorar o me mata, una de dos”, aseguró Fernando, quien indicó lo que espera para el menor de sus hijos en esta etapa. “Si lo hacer feliz quedarse, que lo haga, y si no, que vuelva. No le metería esa presión, que fue la misma presión que me autoimpuse de niño. Que sea el paso que tenga que dar, no más”, expresó.

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