“Maternidad y emprendimiento”: todo lo que debes saber para comenzar tú negocio
La perseverancia es la clave.
Es un hecho: el emprendimiento y la maternidad son completamente compatibles. Y no lo decimos nosotras, sino miles de madres alrededor del mundo que han aprendido a conciliar ambas sin perder la cabeza ¡es difícil pero no imposible!
Manejar libremente tus tiempos y obtener más ingresos son solo algunos de los beneficios que captan a aquellas mujeres que quieren hacerse un espacio en el mercado. ¿Tentador no? Pero llegar al éxito y consolidarse en la industria no sucederá de la noche a la mañana, así que comienza a trabajar en tu proyecto cuanto antes.
Si siempre soñaste con ser tu propia jefa pon atención a estos tips:
1.- Estudia el mercado en el que vas a emprender y analiza a tu futura competencia
Es importante estar al tanto de lo que se está haciendo en el rubro. Así podrás definir con mayor certeza cuál será la diferenciación de tu marca frente al resto.
2.- Crea un plan de negocios
La organización será fundamental, de esta manera sabrás los pasos que deberás dar cada cierto tiempo. Fija objetivos a corto, mediano y largo plazo.
3.- Reconoce a tus clientes
Sí o sí debes tener claro tu público objetivo, sea cual sea tu negocio. ¿Quiénes son? ¿Qué les gusta? ¿Cuándo lo consumen? ¿Cómo lo consumen? Es esencial que manejes esta información para saber cómo llegar a ellos de manera satisfactoria.
4.- Invierte en cosas de calidad
Todo negocio requiere una gran inversión en sus inicios, y más vale que esta se refleje en productos de calidad que te permitan funcionar al cien, es decir en toda tu capacidad.
5.- Asesórate
¿Tienes dudas? Busca ayuda ¿Tienes todo claro? Busca ayuda. La respuesta es la misma. Pasar mucho tiempo pensando en tu proyecto hará que ignores muchas cosas, por lo que una opinión ajena, y mejor si es de un experto, te ayudará a ver con mayor claridad el panorama.
6.- Evalúa tus fortalezas y debilidades
¿Quién más que tú conoce tu negocio? Debes ser consciente de tus fortalezas y debilidades con el fin de poder corregir las falencias y potenciar aquellos puntos fuertes de tu empresa.
7.- ¡No le temas al fracaso!
Ningún empresario exitoso llegó a la cima sin intentarlo varias veces… ¡así que ponte en acción!
Fuente: Entrepreneur
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