Martina Araneda revela el por qué decidió alzar la voz tras las críticas
La hija mayor de Rafael Araneda y Marcela Vacarezza no aguantó la lluvia de mensajes que llegaron en su contra.
Martina Araneda Vacarezza, es la hija mayor del animador nacional Rafael Araneda y Marcela Vacarezza. La joven ha mantenido un bajo perfil a pesar de que sus padres son figuras públicas reconocidas por muchas personas de nuestro país.
Pero no aguantó más. Hace algunos días la joven de 19 años alzó la voz a través de su cuenta de Instagram para responder a las constantes críticas que recibe solo por ser hija de Rafael Araneda y Vacarezza.
"Me aburrí. Paremos con la descalificaciones gratuitas y dediquemos nuestro tiempo a ser, cada uno, mejores personas. Nadie tiene el derecho a descalificar, discriminar o agredir a otra persona; ni yo, ni tu ni nadie.Solo se consigue formar odio y un lugar poco tolerable. Mis redes sociales son MIAS por lo que yo decido lo que hago con ellas y al que le molesta, que apreté dejar de seguir; no es tan difícil, es solo un click", escribió en aquella publicación.
Ahora conversó con LUN donde entregó los detalles del por qué de su decisión de hablar. "Toda la crítica está basada en un prejuicio, lo que se ve desde afuera y simplemente que eres cuica, entonces no hay argumento en ese tipo de comentarios. Me molesta tener que pensar qué voy a subir a mis redes sociales por miedo a que me critiquen o me tiren mala onda. O que no puedo opinar desde mi posición de privilegio. Se acabó, no lo pienso más", declaró.
¿Por qué alzar la voz?
Una de las opciones en las que pensó tras su publicación fue hacer su cuenta de Instagram privada, sin embargo pensó "¿Por qué? ¿por qué debería hacerlo? Que mi perfil sea público no le da el derecho a otro de opinar algo de mí. Ahora, también hay gente que te tira buena onda", agregó.
"Decir desde ya que no voy a aguantar más nada, ni descalificaciones, ni mala onda gratuita y, a la vez, que la gente que es criticada en redes sociales deje de normalizarlo, porque no lo es", sustuvo.
Martina además aseguró que unos años atrás le "afectó que me compararan continuamente con mi hermana (Florencia), decían que ella y mi mamá son rubias, que en realidad se parecen mucho, y que yo no era tan rubiecita, que no era tan agraciada. Saqué los colores de mi papá".
"En esa época no sabía cómo tomármelo y me preguntaba qué le puedo hacer a mi pelo, cómo puedo estar más flaca, qué ropa me pongo, me hizo cuestionarme lo que comía. Una niña de 15 años no tiene por qué estar cuestionándose esas cosas", añadió.
Para finalizar declaró que los hijos de personajes públicos deberían aprovechar su vitrina para hablar de temas importantes. "El ser hija de alguien conocido te da una posición donde la gente te escucha. Tenemos que aprovechar eso para terminar con los prejuicios y hacer algo. Ayudar desde esa vitrina que te da ser hijo de, ayudar con las injusticias", finalizó.
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